Amanecer serena tranquilo.
Aire denso frío.
Olor a hierba y pino.
Energía que me abraza y reconforta.
Sonidos que me envuelven y seducen.
Mi alma sonríe.
Ya nada temo.
Los seres que en ella habitan me dan su amor, su consuelo.
El prana me alimenta el cuerpo, la luz el espíritu.
¿ Que más puedo pedir ?
No siento rechazo ni juicio.
Solo paz y sociego, percibo entre sus ramas y cañadas.
Pierdo la mirada en sus cumbres, cielo claro y limpio.
Recuerdo de paseos y charlas.
Paz, respeto y cariño.
No conozco más noble objetivo, que ser fiel.
A tu alma, a tu camino.